A propósito de las palabras del papa. ¿¿¡La caridad de la política??!

c. lo. 21 de abril 2020

¿Hemos oído bien la homilía de Bergoglio en Santa María ayer o era demasiado pronto?
Recemos por los hombres y las mujeres con vocación política… La política es una forma alta de caridad…
¿¿¡La política??! ¿¿La que ha hecho prevalecer a Trump y Bolsonaro, Xi Ping y Putin, Orban, Johnson y Salvini, pero también todos sus presuntos opositores que corretean por el mismo recinto?? ¿La política, o lo que es lo mismo esa dimensión hipócrita, congénitamente divisionista y prepotente, donde “el fin justifica los medios”, inseparable de la violencia concentrada que todas las instituciones y los Estados ejercen? ¿¿La máscara de la guerra sería una forma alta de… amor generoso y desinteresado?? Impacta oírselo decir justo a quien no para de dar pruebas de diversidad respecto a la política. Pero no sorprende. El engaño de la política como “compromiso por el bien común” es entonado por un coro amplísimo.
Compuesto obviamente por quienes defienden fechorías y privilegios; así como de quienes con buena fe tienen ilusiones de contrastar a los (pre)potentes en su propio terreno. El mejor de los jefes religiosos que sobresale en el escenario mundial por su sensibilidad humana y escucha de los últimos no se sustrae al homenaje a una de las primeras fuentes de corrupción, de mercantilismo, de masacre de los vivos y del planeta aunque en otras ocasiones lo combata con vigor.