El peligro de ser asesinados es cotidiano, en todo el mundo. La violencia difusa es alimentada por los Estados y por sus ideologías opresivas: machistas, racistas, xenófobas. La policía de EE.UU. sigue asesinando impunemente a personas afroamericanas inocentes. El terrorismo yihadista ha realizado la enésima matanza de personas indefensas en Niza después de la masacre de Dacca. Son los coletazos de un monstruo sanguinario que se reclama de los rasgos más feroces del Islam y usa métodos neonazis para fundar una terrible teocracia. Las poblaciones iraquíes y sirias (en gran parte de fe islámica) resistiendo valerosamente a pesar de problemas internos e insuficiente sostén internacional han repelido de nuevo el intento del califato negro de enraizarse. Todos los Estados (de formas distintas) han contribuido al nacimiento de este nuevo monstruo, santuario de asesinabilidad. Estos mismos Estados han titubeado en aplastarlo en su guarida porque están preocupados por sus sucios juegos de reparto de poder en el lugar. Consecuentemente, gobernantes y medios de comunicación esconden sistemáticamente la verdad sobre los peligros que nos amenazan, sobre la resistencia anti-ISIS, mientras su propaganda calla en vez de desalentar a desesperados y enloquecidos de transformarse en canallas nazi-yihadistas. Los poderosos de la Tierra DEBEN DEFENDER SU NORMALIDAD, SUS BENEFICIOS INCLUSO A COSTA DE LA MUERTE DE MUJERES, NIÑOS Y HOMBRES INCONSCIENTES E INDEFENSOS. Para contrastar la violencia imperante y el terror es necesario en cambio contar algunas verdades sobre lo que sucede. Es necesario hacer un llamamiento a la atención de todos, a la capacidad de prevenir y evitar situaciones de potencial peligro, a la confianza y las capacidades de autodefensa entre las personas que se conocen, a distinguir entre las personas bien dispuestas y solidarias por un lado y los violentos y los asesinos potenciales por otro, que pueden ser de paisano o uniformados, de cualquier etnia, proveniencia y credo.
15 julio 2016 LA COMUNE HUMANISTA SOCIALISTA