Luchas y Huelgas en Correos

Correos es la mayor empresa pública estatal con unas 53.000 personas empleadas de las que casi 40.000 están fijas, el resto sufre contratos eventuales desde algunas horas a varios meses. Con una plantilla cada año más reducida, aumenta cada año el volumen de trabajo. Por un lado, la obsesión compulsiva de comprar online cualquier cosa de cualquier lugar está llevando a batir records en la cantidad de envíos diarios, sobre todo de paquetes; por otro lado, en las oficinas de Correos ya funcionan como entidades bancarias -supliendo los cierres de sucursales-, librerías, papelerías, tiendas de souvenirs, y para mandar y recoger cartas y paquetes.
Con estas transformaciones empresariales y sociales, la actual dirección de Correos está reestructurando la empresa para obtener más beneficios, empeorando las condiciones de quienes realizamos el servicio y las relaciones con la gente.
Contra esta dinámica de precarización laboral y dirección autoritaria y represiva con la plantilla y por una mejor y más adecuada organización del trabajo, entonces más personal y mejores medios, las y los trabajadores de Correos se están movilizando en muchas ciudades y localidades de la geografía estatal.
En pueblos de Galicia y Aragón, en ciudades andaluzas y manchegas, en oficinas de atención al público o grandes centros de trabajo y de reparto, miles de hombres y mujeres han iniciado huelgas y paros parciales, concentraciones y manifestaciones.
En Catalunya desde finales de mayo se está reactivando cierto protagonismo. El ejemplo lo está dando la oficina de reparto, la UR4, de Sabadell que desde el 6 de abril hasta el 8 de junio ha estado en huelga indefinida la mayoría de la plantilla. En otras ciudades como Terrassa y Girona, desde finales de mayo siguen las huelgas parciales indefinidas.
Los días 2,3 y 4 de junio fue convocada por los sindicatos CGT, SIPCTE y la adhesión de la CNT una huelga parcial de las últimas 4 horas de trabajo -de 1:00 a 15:00 horas- en todos los centros de trabajo de la provincia de Barcelona. La incidencia y la movilización en los centros de trabajo fueron significativas en Barcelona, Badalona, Castelldefels, Berga, Manresa.
Mientras las movilizaciones y huelgas más grandes, por indicaciones sindicales, parecen que se posponen a después de verano.