La violencia del Estado español. El derecho a la libertad y la mejora de la vida.

Durante la primera semana de marzo 3.700 jóvenes africanos trataron de saltar en varias tentativas la valla de Melilla buscando un futuro mejor en suelo europeo tras meses, o incluso años, malviviendo y esperando el momento. Ha sido el mayor intento hasta ahora. El Gobierno ha dicho que ha sido el más agresivo y violento porque decenas de agentes fueron heridos. Pero rápidamente han circulado imágenes que muestran a guardias apaleando a chicos inmovilizados en el suelo.
El ministro Marlaska lo justifica: «un Estado de derecho y democrático no puede permitir que sus fronteras sean agredidas violentamente».
Las imágenes muestran lo contrario: la inhumanidad del Estado y sus fronteras. Nada sabemos de cómo están estos jóvenes ni si los que pisaron suelo serán expulsados. Con ellos y por ellos, decimos alto y claro:

  • Acogida humana digna y sin condiciones.
  • Solidaridad antirracista contra la inhumanidad de los Estados.