Melilla. LAS FRONTERAS Y LOS ESTADOS MATAN

El 24 de junio alrededor de 2000 inmigrantes, procedentes de África y principalmen te de Sudán, protagonizaron un nuevo intento de cruzar las fronteras de Europa. El balance por el momento es trágico ya que podrían ser al menos 37 las personas que perecieron y más de cien los heridos durante el intento de saltar la valla de Melilla. Según las fuentes oficiales la mayoría habría muerto por asfixia aunque las ONGs que trabajan en la zona estén ya pidiendo una investigación sobre lo ocurrido para esclarecer el papel de las fuerzas policiales de los dos lados de las fronteras.
Los miles de inmigrantes que se hacinan en los campos improvisados al lado de la frontera se están enfrentando a la creciente represión del Estado Marroquí. Este se ha visto reforzado a su vez por los nuevos acuerdos con el Gobierno de España y por la política criminal e hipócrita de la Comunidad europea. Por un lado, se acogen a los refugiados de la guerra de Ucrania, como es justo, mientras rechazan a los refugiados e inmigrantes procedentes de otros lugares financiando a países como Libia o Turquía para que cumplan el papel de policías de sus fronteras. No hay duda sobre el hecho que estas son las enésimas muertes provocadas por las fronteras, los Estados y las leyes de extranjería. Queremos denunciar también las palabras de Pedro Sánchez cuando ha definido esta página negra de la historia reciente “un éxito” desde el punto de vista de la intervención policial demostrando todo su cinismo e indiferencia.

Las imágenes que nos están llegando y golpeando tan duramente pueden ser una razón para reaccionar con aún más determinación y luchar contra el racismo, por la apertura de las fronteras y la acogida sin condiciones. Lo que está pasando nos interpela como seres humanos y nos brinda la oportunidad de posicionarnos éticamente y moralmente al lado de las personas que luchan para mejorar su vida. Podemos reaccionar haciendo primar la solidaridad y nuestros mejores valores para pedir justicia y hacer sentir nuestra cercanía hacia todas y todos los que están siendo víctimas directas e indirectas de este atropello a nuestra común humanidad.

¡Justicia para todas las víctimas de Melilla!
¡Por una acogida digna sin condiciones!
¡Fuera la ley de extranjería!

¡Solidaridad con las personas en camino en búsqueda de una vida mejor!