Queremos aclarar nuestra posición sobre los contenidos de la convocatoria de huelga en solidaridad con Palestina a la que llaman CGT y Solidaridad Obrera para el 27 de septiembre, caracterizados por un relativismo moral que consideramos inaceptable en la misma línea que otras iniciativas de este tipo.
Ha pasado un año desde el ataque de Hamás que causó más de mil víctimas mortales y casi doscientas personas secuestradas y que dio inicio a esta nueva trágica guerra con Israel. Durante este año el ejército israelí ha matado a más de 40.000 personas en el territorio de Gaza, ha bombardeado escuelas y hospitales, ha obligado a desplazamientos continuos, atacando también los campos de refugiados. Además Israel ha alentado y apoyado con su ejército la violencia y las destrucciones de los colonos sionistas contra la población de Cisjordania y acaba de iniciar una nueva escalada bélica en el Líbano con Hezbollah.
Ante estas guerras nos situamos con la humanidad que es su principal víctima y en cuyas esperanzas estriba la posibilidad de una alternativa de paz. Por eso mismo estamos en contra de la lógica bélica de los Estados y de las formaciones político militares que fomentan la guerra y de todos sus aliados internacionales. Esperar de ellos una alternativa de fondo y una paz duradera es una quimera que daña las conciencias.
Estamos al lado del pueblo palestino, por su derecho a la vida y su derecho a vivir en paz en su tierra, ambos negados por el acoso y la represión que sufre por parte de Israel desde 1948, cuando fue expulsado de su tierra.
Estamos al lado de los pueblos hebreos, no solo de la población que vive en la antigua Palestina. Somos solidarios con ellos ante las persecuciones que históricamente han padecido, hasta llegar al intento de exterminio nazi y denunciamos el anti semitismo que se sigue recrudeciendo. Estamos especialmente al lado de las personas de origen y cultura hebrea que, dentro y fuera de Israel, se movilizan contra el gobierno Netanyahu y su guerra.
Estamos en contra del Estado de Israel, de su régimen democrático reaccionario de inspiración teocrática, sin siquiera Constitución y de la lógica genocida y terrorista de su actual gobierno.
Estamos en contra de Hamás, no solo por la acción terrorista del 7 de octubre sino también por su carácter reaccionario y totalitario, por la opresión que supone para las mujeres y los hombres de Gaza, cuya vida y cuya muerte están sometidas a sus cálculos políticos.
Apostamos por la pacificación como camino alternativo a la guerra y a su lógica, como camino revolucionario de conocimiento, respeto y convivencia entre las comunidades. Sabemos que es un camino largo, comenzado por valientes minorías de palestinos y hebreos, pero creemos que es el único creíble. Mientras tanto pedimos el cese de los combates, la salida de las tropas de Israel de Gaza y el fin del acoso sionista en Cisjordania, la liberación de los rehenes en manos de Hamás y de los presos políticos palestinos, así como la entrada de toda la ayuda humanitaria necesaria en Gaza.
En los textos de convocatoria de la huelga del 27 de septiembre, así como de la manifestación convocada para el día 6 de octubre no hay, en cambio, ni un atisbo de condena sobre el papel nefasto de Hamás. Es un silencio grave. El mismo que hemos encontrado en otras iniciativas que han llegado hasta a reivindicar Hamás en tanto resistencia palestina.
A la víspera del aniversario del 7 de octubre, no se dice ni una palabra sobre las mujeres, los hombres y los niños que ese día fueron masacrados, ni se pide la libertad para las personas que, un año después, siguen secuestradas.
Con este silencio cómplice se manipula la justa indignación de muchas personas sensibles ante la tragedia que sufre el pueblo palestino y la impunidad de la que gozan sus responsables.
Por estas razones, como trabajadoras y trabajadores de Socialismo Libertario no participaremos en la huelga convocada por CGT y Solidaridad Obrera el día 27 de septiembre y seguiremos una obra de clarificación desde las páginas de nuestro periódico y en los momentos de debate que vamos a organizar.